Sanar la herida emocional tras un aborto

Sanar la herida emocional tras un aborto
Cuando una mujer atraviesa la experiencia de un aborto, ya sea espontáneo o voluntario, enfrenta un profundo dolor emocional, aunque a veces no lo exprese abiertamente. La tristeza, el sentimiento de culpa y otras emociones intensas suelen acompañar estas vivencias, dejando una huella significativa en su vida.

En mi trabajo terapéutico he visto repetidamente cómo estas emociones pueden quedarse bloqueadas, afectando el bienestar de la mujer.

Este ejercicio que te ofrezco está diseñado para reconectar con esas emociones y comenzar un proceso de sanación interna. Mi objetivo es que, a través de esta práctica, encuentres un poco de luz en medio de esta experiencia dolorosa, sin juicios ni reproches. Sé que ya cargas con suficiente sufrimiento, incluso si la decisión de no continuar con el embarazo fue tu elección.

Este proceso está pensado tanto para mujeres que han vivido abortos espontáneos como para aquellas que optaron por un aborto voluntario. También puede ser útil si tu bebé llegó a nacer, pero falleció poco después. No pretendo que con este acto simbólico se cierre por completo la herida que deja el aborto, pero sí que empieces a mover tus emociones y dar los primeros pasos hacia la aceptación.

Volver a la vida, con amor y compasión

Con todo mi cariño, deseo que este ejercicio te ayude a retomar tu vida, a reconectar con la belleza que aún te rodea y que tienes todo el derecho de disfrutar.

Sanar la herida emocional tras un aborto es esencial si antes de volver a quedarte embarazada ya que así ayudarás a que ese hijo que todavía está por venir a este mundo puede vivir realmente su vida y no la de su hermano muerto.

Y si ya has tenido un hijo/a después de un aborto, te invito a que hagas el ejercicio Recononciendo a mi hijo que puedes descargar gratuitamente en la web. Te dejo el enlace.

Este es un primer paso en un camino de sanación, para que puedas avanzar con más ligereza y amor hacia ti misma.